Y dime tú
qué sientes
si te miro y sonrío,
qué recuerdos te llegan,
qué alegrías me aguardan
tras los recuerdos idos
cuando las luces llegan
y retornan al tiempo
que parece perdido.
Y dime tú
qué sueñas
si acompaño tu sueño
y marchamos a dúo
a sueños que no han sido.
A largas caminatas
en profundos vestigios
de sueños que soñamos
y alguna vez marcharon
hacia mundos vencidos
por quimeras perdidas
y superfluos motivos.
Y dime tú
qué esperas
si la esperanza queda
midiendo los vacíos
sin sin sopesar lo mucho
que soñamos a dúo,
sin medir las distancias
de los tiempos ya idos,
porque el tiempo no busca
lo que ya está perdido.