Un Sueño Largo Largo
Un Sueño Largo Largo

Un Sueño Largo Largo

En un sueño muy largo

mis ramajes se extienden,

taciturnos.

Pasan por entre muebles,

zapatos, ropa, libros,

se alzan sobre la mesa,

incautando los pocos

caramelos que quedan.

Adivinando apenas

por su olor, su sabor

de amigos lisonjeros.

Van hacia la ventana

de entreabiertos postigos

endilgando a la noche

su pereza de siglos,

en va y ven, deambulando,

cual lenta caracola

van tejiendo los miedos

entre luces y sombras.

Tocan todas las cosas

que encuentran a su paso,

se disfrazan de ágiles

dedos que memorizan.

Rozan, como queriendo

despertar mis sentidos,

las hojas con los versos

que aún no había escrito,

riéndose de todo

lo que aún no imagino,

perdida en los estragos

de un placer de domingo.

 

Abren de par en par

las ventanas que encuentran

y se marchan, reptando,

hacia otra nueva espera.

 

Yo, entre tanto, descubro,

rendida ante mis sombras

e ignorando mis miedos

que hay otra noche anonima

en mis propios senderos.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

RSS
Follow by Email
WhatsApp