Si llegara a cantarte,
no sabría,
cantarte para siempre
no podría.
Cantaría a tu imagen
a tu sonrisa,
tu alegría, tu magia,
cantaría,
mas sólo frente a tí
como se canta
a los amores locos
que te quitan
la paz en el soñar
y en la vigilia.
Si llegara a cantarte
sería solo
para alegrar el alma
tras la cita,
pues tu pides poder
para moldear mi canto
y mi canto nacio
con aleteos,
sugiriendo su modo
y cicatrices,
que tranquilos se van
sin que los siga,
porque mi canto es libre,
tan libre como el viento
y el viento no tolera
directrices.