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Fehacientemente protegida. Heredera de un cosmos trashumante. Perdida en la quietud  que da la Diana, cuando en su bosque esculpe los pesares en la piel de los árboles, o en las lajas delgadas de las

¿Quién soy y quién no soy?  A todas luces  este camino largo  me conduce  a no saber de mí,  mas que delirios  de uno al otro bando. Si mi delirio desdice sin saber  lo que

Quizás todo transforme  las cosas que te digo:  aclarar los detalles,  según deseos intimos,  languidecer al alba  con el mismo mutismo  que se integró en la noche  cuando todo aclaramos  y todo lo perdimos.  Quizás

Seguramente,  indagará la brisa  el por qué de los tonos  de la tarde,  y volará de prisa  en los ramajes  sonsacando las tantas bailarinas  que retocen al ritmo  de la brisa,  en su baile fortuito 

Ser y no ser, pérdida,  en las propias marismas  que nos cede la vida.  Ser y no ser, pulsando  verdades y mentiras  en el gran algoritmo  que no encuentra salida.    Y remamos, buscando  nuestra

Si pudieran mis brazos  abrazarte de nuevo,  contarte mis desvelos,  sentir, mientras observo  que es inútil perderme  a través del anhelo  que presiona mi musa,  cada vez que te sueño,  recordando lejanas  rutas para el

Sin pedir nada a cambio,  sin trastornar premisas,  sin inquietud de alas  que avizoren mi prisa,   llego siempre a la mar  clamando mis pisadas  sobre la arena en ondas,  tras las olas que arriban  en

Sobre tí, todas las antorchas,  nacidas en tu limbo,  quemándote por siempre,  languideciendo siempre  en todos tus abismos.    Piel manchada una vez  y otra vez  en oscura pertenencia,  reclamando su cruz  para languidecer,  y

Solos:  como si la soledad  hubiera sido  la última respuesta  del herido,  con el celaje cierto  de algún final perdido.    Como si los caminos  pertenecen a aquellos  que por hambre o victorias  se olvidan

Suelo soñar que vuelo entre tus alas,  un sueño poderoso  y acordado,  con plenitud de luces  y de sombras,  en mi única espera,  y vuelo raudo. De soslayo,  suelo sumarme  a multitud de azules  en

Cantando nuevos Himnos,  soñando nuevos lazos,  alzando nuestros justos  derechos y cuidados,  hermanaremos todos  esa unidad en ciernes  logrando los abrazos.  Alguna vez seremos,  para lo ya anhelado,  la confianza y la fuerza  que sigue

Alguna vez soñamos  con un mundo distinto,  donde toda la fuerza  del País fuera un mito,  para cualquier ajeno  al País que vivimos.  Y es que la Patria tiene,  lo mismo que hace siglos,  sonrisas

Tal vez, es el talvez  de todos los conflictos…  Amanezcamos juntos,  entregándolo todo.  Por ahora:  nada que traslucir…  La llamada esperanza,  prostándose en las horas  del deseo,  vuelve a ganar vigor,  cuando se marcha…  Indecisa: 

Todavía, la mar sigue latiendo,  en sus heridas.  Las olas bailotean  y, a su espalda el viento es vencedor  de las mareas.    Todavía,  el cielo luce azul,  tras la vigilia,  y la luz presumida

Todo vuelca a la luz,  cuando la lluvia  se permite marchar  a otras fronteras,  y abrimos las ventanas,  nuestra risa,  vuela en la brisa  y calza nuevas trenzas…  Ahora, la tarde  tiñe en rojos  el