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Dedicatoria
Dedicado a todos a quienes he amado y amare para siempre.
Prólogo
No busque ser soñadora, los sueños me buscaron a mí y me encontraron despierta. Entonces no soy totalmente responsable por soñar y usar mis sueños de la única manera en la cual puedo hacerlo. Solo busco ser agradecida por los bienes que recibo y, al mismo tiempo, crecer lo más posible hasta la altura de quien recibe un homenaje, devolviendo en frutos propios la dádiva que se le entrega.
Este es el único objetivo de mi obra.
La razón es más simple, abrir los ojos a la realidad y exponerla usando todas las voces que me acechan.
La realidad de lo que debe ser, según mi propio sueño, siempre ha estado del lado del corazón, y el corazón no es más que el motor racional y emocional de la conciencia.
Esa que pide a gritos, cada día, que expongas la realidad de un mundo cada vez más cercano, más visible, más nuestro, más sentido.
Quisiera
Quisiera que volvieras por los mismos caminos; pero los caminos, como sabes, no tienen nuestros nombres. Ni siquiera le quedan nuestras huellas. Quisiera que volvieras por los mismos cantares; pero se nos quedaron los
Agradable Lección
Agradable lección, la tuya, por marcharte, cuando quedarte ahora sería la perfecta arma de destrucción que construyeras. Dejar el mi sin ti, Sin más alarde que resucitarme después, alguna tarde e invitarme a ese
Cuando Se Va La Tarde
Cuando se va la tarde y te queda la esperanza de otro día mejor. Cuando las nubes tienden sus difusas espaldas sobre el cerro, que voltea su faz para mirar al mar. Cuando el descanso
Esqueleto
Huesos, maniquí deteriorado que desprendió de carnes sus costados para quedar desnudo de matices. Armazón presumido, que mantiene la verdad del andar que nos sostiene en el débil equilibrio de los pasos. Adalid protector de
Aguarda
Aguarda, tu corazón detiene la prisa de los tiempos, hechos parábolas móviles. Se han ido, vacilantes, los minutos que piensan lo que opinan las horas, cuando una alondra vuela sin dejar los susurros tras las
Cuento Triste
Hubo una vez, teniendo la certeza del ser, una hormiguita, como nadie, segregacionista solitaria. Con un ego tan grande, que pensaba triunfar en toda lid, solo teniendo su férrea voluntad y la porfía de ser
Galante Caballero
Galante caballero que persigues la total aquiescencia de mis besos, ven por la tarde mudo, nuestras musas están jugando a cazar los pájaros que danzan en penumbra. Quédate allí, rotundo, sin herir la poesía. La
Podría
Podría irme de ti, sin avisarte, podría irme de mi, sin compartirme, podría ceder a todo, y sin embargo conservarme, nítida, impoluta y volátil, en mi calma. Sin esos desafueros que pretendes al endilgarme
Desde Allá No Sé Dónde
Desde allá, desde donde la vida se rellena en miserias, haciendo caso omiso de todos los conflictos, te compongo esta muestra descomponiendo entuertos en la evasiva norma de verme descubierta, Mirándome a mí misma.
Puedes Cantar Al Hombre
Puedes cantar al hombre con un canto ceñudo, que no altere las viseras de la opinión de prensa. Pero, para acabar con las verdades tristes bastará la alegría de la entrega, un mar vistiendo juntos
Con Tu Verbo
Con tu verbo de construir se alzaron muchas casas para esconder, frente al mar, los pájaros nativos, y tuvo el nido entonces las paredes sagradas donde apaciguar el hambre y la nostalgia. Con tus
Es Esta Vieja Casa
Es esta vieja casa que me pide recontar los recuerdos enlazados en el pueril collar de la niñez. Mis pasos, ya libertos buscando con los pies el calor del contacto entre este piso cálido
Ahora
Ahora que te has vuelto la mayor y mejor de todas tus promesas. que sabes ya luchar y agradecerlo mientras el premio aguarda y se te entrega. Ahora que, ya de mi, no estás
Amigo Morrocoy
Ponte el sombrero marrón que te pones a diario y te queda tan grande y tan pesado. Arruga más la frente y el pescuezo, y las mangas redóblate en el preciso esfuerzo de venir a
A Mi Cabellera Larga
A mi cabellera larga le puse luceros claros. Cuando abrí nuestras ventanas, volaron como los pájaros. Los cabellos, azarosos, cruzaron vastos espacios con un brillo, que a la luna le pidió el brillo prestado.
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