La Pelota Rota
La Pelota Rota

La Pelota Rota

Giraba en el aire

con afán brioso

uno la lanzaba,

otro la atrapaba

porque adivinaba

su vuelo al instante.

 

Y ahora ¡está rota!

 

Su cara risueña

se tornó bien triste

y cuando los niños

la vieron herida,

la dejaron quieta,

solitaria y dolida.

 

Y ¡está tan solita!

 

Pobre, pobrecita

la pelota rota

ya no tiene niños

que alegren su ronda,

que corran, que brinquen,

que salten en pos

de la pelotica

que se desinfló.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

RSS
Follow by Email
WhatsApp