Tríptico Azul

¿Por qué me atribulas así con el amor que callas o qué gritas y estremeces mi llanto sin lamentos? ¿Por qué me endulzas amargor de vientos y amansas brisas y acaricias lento este amor y …

Es imposible amar, es imposible  cavar drenajes en esta agua estancada, sin un impulso vital que la desborde y abra caminos o nuevas añoranzas. Es imposible amor, es imposible tu mirar obstinado pidiéndome incesante ser …

Desde el fondo de mí duele esta página cerrada para siempre. Este libro  que no deseo abrir una vez más. Esta historia repetida ¡tantas veces  clausurada! Este no ir a parte alguna, Esta sublime colisión …

En volandas llego hasta las cavernas de tus ojos, tomo de ti el elixir para mis angustias. Me despellejo, quedas pensando en mi  otrora visionaria, relamiendo las límpidas auroras nacidas de tu sombra y de …

Cuando te vayas me quedarán los sueños para seguir soñando que te quedas. Me quedará la prisa de un olvido tan terco que te recuerde en todo lo que dejas.   Cuando te vayas me …

Dentro de mí, en mi profundidad que vive, una ignota acechanza te recuerda. Cada vez que muero de mi misma te recuerdo; cincelado, estoicamente nivelado a mi realidad  de cada día. Cancelo entonces para tí …

Sólo sé que fuimos andando y andando y la noche, al irnos se nos volvió en llanto. Sólo sé que había ilusiones, ansias, mucha ideología, muchas discrepancias, mucho de no ser lo que nos dijimos, …

Incontrastable y franca en su pureza la astucia de tu mar en mi bahia rompe en olas traniqulas, y, de súbito la marejada aumenta y se diluye en mil pompas que bailan en mi orilla …

Canto a la lejania de esas horas en que marchaba mi compás el hambre de atravesar ruidosa los espacios y lacerar tu piel con mis abrazos, y lacerar tus labios con mi boca.

Tu, culpable tu, quien por derecho se va a quedar con un retrato hecho de hombre cruel, miserable, veleidoso, incapaz. Yo quedaré, así de esta manera, con la conciencia entera de ser la pobre víctima …

Todo está bien ahora mi alma está tranquila succionando recuerdos procuro que sean pocos, pero muy bien sufridos. Aquellos que me agobian, que no te dan el gusto de quedar bien parado, aquellos que más …

Poderosos motivos me han unido a tu abrazo: busqueda del calor que se nos niega, la incesante agonía con que suele azotar la soledad, tal vez temor a fracasar o hacerme daño. Yo me cole …