Siempre
Siempre la misma, siempre lo mismo, y, en cantinela, el mismo ritmo sobre las olas de mi espejismo. En el paisaje, sólo el camino que da las sombras a mi destino, siempre jugando con …
versos incluidos en Desde Entonces
Siempre la misma, siempre lo mismo, y, en cantinela, el mismo ritmo sobre las olas de mi espejismo. En el paisaje, sólo el camino que da las sombras a mi destino, siempre jugando con …
Estoica, sorprendida, mirando los vaivenes de una vida que te advierte de lejos la partida. Sintiendo pertenencias que no existen, mientras las ilusiones que persisten, dicen muy poca cosa de mi huida. Entrampada …
De repente, encuentro las palabras que me faltan, tanto como yo misma en la jornada, de ese seguir tejiendo cual si nada pasara en torno mío, tras la zafra de inútiles bosquejos que me aguardan. …
Si dentro de mi misma la antigua voz que te nombra, los silencios parecen convertir las auroras en algo más que música danzando entre las rosas. Si logro en los recuerdos ir hilando sin …
No sé de donde nacen las penas de mi alma. Ni sé de los caminos, llevándome a encontrarlas. No sé con cual dictamen los recuerdos me lanzan esos miles recuerdos que mis páginas cargan. …
Ayer entendí las causas de tu, siempre, desespero que maneja, a todas luces, el muero, porque te quiero. En un querer de ilusiones, voy y vengo en los anhelos de quererte más que nunca, …
Mi río canta en las voces de un eterno desafío, cruzando cada mañana los límites prometidos. El se deja gobernar por las olas, en su rito de llegar hasta el mar, abriéndose al paraíso. Mi …
Hoy el día está gris, como si no importara merodear por las sombras, sin las luces izadas. El sol, entre las nubes, tranquilo se acicala para las cuantas horas que dura su jornada. …
Me gusta unir los versos que siempre he presentido, aguardar mientras formo las notas de mi ritmo. Encontrarme, a mí misma, con el gran desatino de animar la marcha sin malograr los signos. …
¡Hermoso! ¡Más que hermoso! Sé que el canto no es mío; por eso bates alas con tu libre albedrío retozando en las puertas de todos los designios. Y yo, releo tus versos, lo mismo …
Mientras pasan los días, las ventanas se abren a mi melancolía. El tiempo pasa tenue para que yo encuentre y fustigue las horas con mis tontos reveses. Las nubes se amontonan, sugiriendo a sus fuentes …
Alguna vez tu fuíste, alguna vez yo fuí. Alguna vez seremos y, unidos a los lazos, unidos venceremos esas tontas batallas que nos minan, de lejos, sin intentar golpearnos o imponernos los frenos. Alguna …