Aunque no presumamos
desechamos las obras,
ya trazadas,
para hacer los caminos
solo nuestros.
Ver poco, sin pensar,
en los otros que llegan,
o llegaron,
mucho antes que nosotros
para sembrar sus huellas.
Sin embargo,
siempre habrá otro
desechando las obras
que sin pensar, plantamos.
Cual árbol sin raíces
temiéndole a la tierra…
Este existir existe,
desde hace muchos siglos,
atravesando Eras.
Solo hacemos la historia
que, sin pensar, nos llega,
¡plenando de matices,
las puertas de otra Era!