Apaciguando

Apaciguando senderos

me puse en aras del canto,

porque si te quise tanto,

no ando buscando consuelo.

Yo tengo un «siempre me muero»

cuando te miro a los ojos

y me van llegando abrojos

del recuerdo y el te espero.

Encontrándote en la esencia

de mi sentida tonada

ahora, ya no entiendo nada

de este querer sin querencia.

Porque me lleva la fuerza

de un hormigueante deseo,

cada vez que yo te veo,

aunque se note tu ausencia.

Amarrandote a mi estela,

que hago yo pa’compartirme

entre este querer tan firme

y esta razón que flagela.

Mejor me voy con la luna

de mi pena palpitante,

pues si no te tuve antes,

no hay razon para la espera.

Doliendo se va el camino

que me pense caminar.

Y,

aunque me duela cambiar

tomaré otros senderos

porque tu amor tan ligero

ya no lo quiero sembrar.