A pesar de lo mucho
que te miro y sonrío,
el tiempo va ganando
distancias, desafíos.
¿Cuánto estaremos juntos?
¿Cuántos sueños perdidos?
¿Cuánta ola encerrada
en poderosos ríos?,
que van a parte alguna,
si alguna vez han ido.
A pesar de los tiempos,
en los tiempos perdidos,
está la simple música
que llega a nuestro oído,
descifrando deseos,
que aún no se han perdido
entre la bruma suave
del tiempo y del olvido.
A pesar de nosotros
siendo lo que fuimos,
hay un cerco profundo
que nos lleva al olvido
y, respiramos siempre
cual si fuera delito,
rediseñar momentos
que siempre fueron nuestros
en nuestro fuerte nido.
A pesar de nosotros,
la distancia se mide
por lazos destruidos,
y los nuestros son fuertes
lazos para el futuro,
que aún espera premios,
sin soledad, ni muros.
Es por siempre anhelar
que, caminando juntos,
tuvimos la certeza
de construir los muros
para lo bien ganado,
que se llama futuro,
en esa fortaleza
que une nuestros mundos.