Algunas veces pienso
acerca de la vida
sin despejar incógnitas
que, a veces, me convidan
a esa lejana búsqueda
del adiós y bienvenida.
Algunas veces sueño
que alcanzo el universo
de las cosas pequeñas,
perdida de mi entorno
y de sus ecos.
Algunas veces miro
como la mar te ahoga,
te desprende, sublima,
la tonta majestad
de tu búsqueda eterna
entre la bruma.
Algunas veces vago
dentro de mis memorias,
con las antorchas niñas
de mis primeras luces
y resurjo de nuevo
sin penas y sin glorias.
Y tan sola que vago,
miro, sueño, pienso,
tan sola permanezco
en los vanos intentos
de perseguir lo opuesto.