Vacío
Vacío

Vacío

Dormidos desarraigos,

ya vencidos,

juegan a conjurar

mis desvarios.

Callo, hablo,

me dejo trasplantar

a otros desaguisos

que nunca fueron míos.

Doy asilo al pensar,

y a pesar mío,

voy perdiendo esa nada

que es mi eterno vacío.

Clamo por esos lares,

ignotos, ya perdidos,

y me encuentro

a mi misma,

huyendo de mis sueños:

¡porque ya no son míos!

 

Frente a mi:

todo el vasto horizonte perdido

clamando mi presencia

llamando mis sentidos

con llamaradas que siempre

escuche en mi delirio.

Voy a mi ruta eterna

perdiendo los sueños

¡que siempre fueron míos!

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

RSS
Follow by Email
WhatsApp