Para mí,
que ahora vuelvo
de mi andar tan cansino,
no deteriora el tiempo
su mensaje de siglos.
Sigo midiendo pasos,
cantando,
y al unísono,
me encuentro con el canto
y el camino.
Entonces mi andadura,
imprecisa o certera,
va hilvanando reproches
en las noches que vuelan.
Sigo hilando en los hilos
de la melancolía
y así,ya resurrecta
en su suerte y la mía,
caminando hago citas
con el canto y la senda
pidiéndole más frutos
al árbol de la vida.
Para mí,
que retorno,
sin encontrar mis huellas…