Y después los silencios
guardando las palabras…
En medio de las quejas,
la búsqueda de paz,
enarbolando
las gastadas banderas:
las cosas que sentimos,
los abrazos y ausencias
que llevamos por dentro…
Y después, despertando
para seguir soñando
sólo los mismos sueños
que una vez y otra vez,
tuvimos y murieron,
entre el absurdo y siempre
aterrador silencio…
Y después…
No fue lo que dijeras
o que dije…
sólo lo que sentimos
duplicarse en el tedio,
y entre tantas palabras
que, cual pájaros tristes
volaron sin remedio
a las ramas más altas,
las que casi comienzan
a rozar los aleros
para otear los caminos
de soledad cubiertos…
Porque, en medio del todo
los que nos sabe a tedio,
quedó una triste musica
que abriga, sin quererlo,
diciéndonos despacio
lo que quisimos siempre
y ya nunca tendremos:
¡Total! la vida pasa
sin pensar en los premios…