Detrás de las oscuras lejanías
saboreando la brisa
y el paisaje
siento el grupo de alas
saludando
la mañana nacida
en sus cantores.
Va descubriendo el cielo
sus colores
adueñándose ya
de las canciones
que paso a apaso
crecen en el bosque.
Mientras la soledad
dice tu nombre
y oigo de tí los versos
en susurros
nacidos del silencio,
o los recuerdos
que colmaron
tus noches y mis noches…
Y es ahora, ya clara
la potestad del día
entrando en mis recuerdos,
trajinando,
una vez y otra vez
tus culpas y las mías,
como si fueran cuentas
de un rosario…