Es aquí donde empieza
la roída tragedia.
Es aquí cuando luchas
sin buscar las amarras
que una vez mantuviera
la barca entre las aguas
de un andanal de búsquedas
que no llegan a nada.
Es aquí cuando clamas
la lágrima olvidada,
la plegaria entonada
en no sé qué de recuerdos
y un no sé cuánta lágrima
pérdidas en las tardes
con su sol ocultando
la sonrisa callada.
Es aquí, en el ahora
que tiene tantas páginas,
y no deseas leer,
una vez y otra vez,
las respuestas cruzadas
que jamás terminaran,
mas que en tontos recuerdos,
mas que en tontas veladas…