Quizás
Quizás, de mis muchos abismos surgirá un sol radiante. De mis muchas pesares, quizá alguna bandera marchará en pos del viento, riéndose del mundo y de mi misma, para mi propia suerte. De …
Quizás, de mis muchos abismos surgirá un sol radiante. De mis muchas pesares, quizá alguna bandera marchará en pos del viento, riéndose del mundo y de mi misma, para mi propia suerte. De …
Desde el fondo de mí duele esta página cerrada para siempre. Este libro que no deseo abrir una vez más. Esta historia repetida ¡tantas veces clausurada! Este no ir a parte alguna, Esta sublime colisión …
Y todo el polvo que tosen los caminos le impuso a sus zapatos envejecer sin rumbo. Tras una noche larga de llegada y retorno, de búsqueda y encuentro de lágrimas y asombro. Por …
Ven mamita que hoy te quiero mi cariño regalar y un obsequio muy bonito que te fabriqué en la escuela con las flores mañaneras, un pedacito de sol una ilusión vuelta estrella y un beso …
Dentro de mi redención el día se hace largo. La epidermis, huele a esencia de nardos. La caricia se escapa lentamente en mis manos y unas lagartijas, dentro de su encanto, se acercan dejando sorpresa …
Allende el mar, cercana a tus riberas me puse el camuflaje de infortunios, para inutilizar, de alguna forma, tu celeste impiedad de ríos profundos. Allende las fronteras de tu boca, puse en la mía …
Yo no vengo de donde, intrínseca la noche, se vuelca en los efluvios de la melancolía. Ni de donde las largas horas de la penumbra se cobijan de insomnios, inspirando cadencias a la melancolía. …
En mi barca, imbornales para achicar las aguas que suben a su modo y me delatan ante el inmenso mar que me condena. En mi barca, todas las acechanzas venciendo los impulsos de llegar …
Hay una desnudez comun entre las hojas que se asoman y entregan a la brisa. Multiformes colores, graciles bailarinas van, desnudas de ritos a jugar con la magia de las aguas tranquilas del río, en …
Tú, la necesidad de escribir, sonreir, deleitarme en tus pasos, tus risas, tu salud, tus «te quiero». Tú, la grandeza del tiempo compartido cuando buscaron tus ojos mi silencio y espera, porque intranquilo estabas, y …
Desde siempre, la luna baña los canales del agua y la corriente fluye, esparciéndose libre por las calles, llevando el fango que siempre reverdece más allá de los ríos y sabanas donde la hierba crece. …
Yo nunca supe ser, luego, no he sido. Pero ya no me quejo de lo que no he vencido. No, nunca supe ser, luego, no he sido más que el triste retrato que sigue siendo …